Así que a menos de cuatro semanas para finalizar el plazo para las inscripciones a la XXII Mereth Aderthad of ofrecemos un nuevo fragmento de las entradas al diario de la princesa Estelmir:
Entrada 22
Hoy he estado explorando Rivendel y he encontrado las cocinas. Aún quedaban pastelitos de arándanos de anoche y he cogido un par. Me los he comido en el prado junto a la cascada. Desde allí se ve el puente y he visto varios jinetes cruzarlo con prisas. Debe pasar algo.
Entrada 23
Los días han pasado muy de prisa y mañana nos marchamos de Rivendel. Hoy ha habido una fiesta de despedida en la Sala del Fuego, pero todas las canciones sonaban tristes.
El maestre Inglomo me ha estado explicando que ahora el viaje será menos pesado porque iremos por el Gran Camino del Este.
Entrada 24
Hoy después de cruzar el Último Puente hemos encontrado tres jinetes al borde del camino.
Se han acercado a Padre y le han dicho “Hemos venido a tu llamada” y Padre les ha dado la bienvenida y se han unido a la escolta.
Llevaban capas grises y un broche en forma de estrella. Y entonces me he dado cuenta que Padre lleva uno igual. No se lo había visto antes y le he preguntado qué era. Me ha mirado y me ha dicho “Creo que no atiendes bien en tus lecciones. Deberías saberlo. Estamos en tierras del Reino del Norte” Me he puesto roja de vergüenza.
Entrada 25
Estamos en Bree. Había mucha gente en las calles y nos ha recibido el alcalde. Ha habido discursos y cosas de esas de mayores. Muy aburrido. Luego hemos ido a la posada. Había un señor muy viejo, no paraba de hablar y de hacer reverencias hasta que padre le ha dicho algo sobre cerveza. Como nadie me hacía caso he empezado a explorar la posada. Está llena de salitas y habitaciones y hasta tiene unas especiales para niños, con ventanas redondas muy divertidas. Estaba tan cansada que me he quedado dormida en una. Era muy cómoda. Me he despertado porque he oído gritos y ruidos en la calle. Al volver a la sala, madre me ha abrazado y me ha preguntado dónde estaba, llevaban un rato buscándome. Les he dicho que estaba en una de las habitaciones de los niños y todos se han echado a reir. “¡Niños! Son para hobbits” han dicho. El posadero (Mantequilla, o Manteca o algo así) ha llamado uno de sus criados y me he dado cuenta que aunque es de mi estatura es un hombre adulto. “Sigues sin recordar tus lecciones” me ha dicho Padre “ya has oído hablar de los héroes de la Comarca y no tardarás en conocerlos”.
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